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¿Conoces el Ginkgo?

El Ginkgo biloba es un árbol único en el mundo, originario de China. Es uno de los árboles más longevos, puede llegar a vivir hasta 2500 años. Y desde hace más de 2000 años, se ha utilizado con fines ornamentales y terapéuticos, especialmente en la Medicina Tradicional China. Para los monjes chinos se trata de un árbol sagrado, cuyas hojas han utilizado para preservar las funciones mentales.

Los responsables de las acciones beneficiosas del Ginkgo biloba son los flavonoides (ginkgoflavonoglucósidos) y terpenoides (ginkgósidos y bilobálidos), que se encuentran mayoritariamente en las hojas tan características de este árbol. Estos compuestos específicos aumentan la circulación sanguínea central y periférica y, como consecuencia, se hace más eficiente la irrigación de los tejidos orgánicos.

Existen estudios que afirman que las hojas de Ginkgo biloba ayudan a mantener el bienestar mental y la concentración en la vida diaria, una función cognitiva buena y la memoria cuando nos hacemos mayores, así como mejorar problemas de concentración de los jóvenes en periodo de estudio. También facilita la circulación periférica y contribuye a una audición y visión correctas, y presenta un potencial antioxidante, que protege nuestro cerebro del daño oxidativo. Varias investigaciones han estudiado su potencial en el tratamiento del Síndrome de los pies y manos frías (Enfermedad de Raynaud), en la reducción del deterioro cognitivo y en el alivio del estrés y mejora del estado de ánimo.

En el mercado podemos encontrar complementos alimenticios de extractos de las hojas del Ginkgo biloba. Se recomienda consumir aquellos que tengan una alta estandarización en sus principios activos. Además, la mayoría de compuestos vegetales tienen baja biodisponibilidad en nuestro organismo, por lo que aquellos que se unen con fosfolípidos permiten una mejor absorción del principio activo y, por tanto, una mejor acción en el organismo.

Los extractos de hoja de Ginkgo biloba son bien tolerados por el organismo. Sin embargo, no está recomendado su uso en personas que hayan sufrido algún episodio de epilepsia, ya que el Ginkgo biloba puede causar convulsiones. Tampoco se recomienda consumir en caso de estar embarazada, querer estarlo, o en periodo de lactancia. También debe consultar con su médico si está tomando anticoagulantes.